Quinta Victoria en los 500 km de Alcañiz. La carrera más intensa

Ya os dijimos que estaríamos en los 500 km de Alcañiz y que las cosas iban a estar complicadas. Todo correcto. Los nuevos D1 dejaban al Ginetta no sólo como D2, sino de forma evidente en una clara inferioridad de condiciones sobre varios de los rivales que veíamos en la hoja de inscripción. Vale que estamos acostumbrados a lidiar con estas, pero ya sobre el papel las cosas se veían difíciles.

La épica pasaba por dos cosas; la primera es la de siempre, ser impecables en el trabajo: "Bueno" no es suficientemente bueno para ganar si pintan bastos, y pintaba el As. Todo pasaba por la obligación de los pilotos de hacer una carrera al sprit de 4 horas, que el coche aguantase así en condiciones regulares (no es nada fácil que haga durante 4 horas buenos tiempos) y que el tiempo de boxes fuese el mínimo posible. La segunda es que hubiese algo con lo que no contamos antes de ir ¿Pudimos?


Llegar fue una odisea. o peor. El camión tenía una avería y nadie parecía dispuesto a repararlo a pesar de contar con las piezas, los mecánicos, el dinero y la buena disposición por nuestra parte. Desde aquí le mando un cariñoso abrazo a la gente de MAN y especialmente a su servicio de 24 horas, que no acepta como medio pago ninguno conocido o por conocer salvo la SOLRED y creo que otra tarjeta más (ni débito, ni VISA, ni Mastercard, ni American Express, ni Diners Club, ni un explícito "haz un presupuesto por lo alto y te dejo efectivo en depósito por EL TRIPLE"). Eso sin contar con que si tu camión tiene Pritarder, que ni yo ni casi nadie sabe qué es, por la bomba de agua, LA PIEZA, nos presupuestaron 7.513,56 euros (puedo fallar en los céntimos) contra los 890 que vale si no lo lleva. Otro abrazo al Sr. Pritarder y su familia, especialmente a su madre.

Bueno, que me distraigo. A cuenta de lo anterior llegamos a Motorland el jueves ya bien tarde, sin tiempo de armar el box, bajar los coches o preparar nada, así que a pesar de que por la mañana no rodábamos ¿a que no sabéis a que hora salían las cuentas de que deberíamos estar desayunando???? Los más fieles lo sabréis de antemano, ¡¡a las 7:30!!

Ya el viernes y con mucho trabajo por delante llegamos al circuito para armarlo todo y salir a rodar por la tarde. Para empezar llevábamos los dos coches y como no podía ser de otra manera los problemas continuaron. La caja de cambios del negro fallaba, cosa bastante extraña porque era ABSOLUTAMENTE NUEVA, con sus preciosos precintos y todo, y antes de oír por radio eso tan navideño de "la quinta no entra" habrían pasado puede que 30 minutos de uso.... Bueno, toca abrir la caja.... o no, porque estando precintada casi mejor dejarla como está.

Como teníamos por allí otra caja decidimos abrir la otra, que venía de correr las 24 horas de Barcelona, y el primer síntoma era bastante malo, tenía lo que parecía un diente en el imán.... ¿estaría rompiendo? Al abrirla comprobamos que no, con bastante estupefacción, porque entonces cabe preguntaros de dónde salió el diente que tenía dentro en el imán... ¿¿¿¿????


Y tanto trabajo en boxes no podía distraernos de lo importante, que es que los pilotos tenían que salir al sprint más absoluto desde el minuto 1 y por la parte de Set-Up nos encontrábamos con el lío de que a base de frío aquello no acababa de encontrar temperatura en las gomas. Basta decir que todos los pilotos hablaban de una cosa que no mola nada, el comportamiento del coche es irregular y cambia con la curvas, llegando a la conclusión de que sólo podía ser porque los neumáticos llegaban a curvas similares a temperaturas diferentes en función del trabajo anterior.... ahora haz un set-up con esa información.

Porque ya el sábado no había mucho más tiempo, 40 minutos de libres y en seguida la quali. Sin embargo un nuevo sol nos alumbraba y las cosas iban bien, con Oliver haciendo la pole de la categoría y tercero de la general, y Kosta rodando en los tiempos buenos a igualdad de neumático. La cosa pintaba bien.

Bien como para estar ahí, pero no como para ganar. Los pilotos buenos del Porsche y el Viper dejaban claro que eran los rivales a batir, con tiempos que mejoraban en nunca menos de 5 segundos los del Ginetta. ¡5 segundos por vuelta en el mejor de los casos! y 6 también....

Oli tras 4 horas de carrera y recién bajado del coche...
Y con estas nos fuimos a la oficina a terminar de perfilar una estrategia basada en aprovechar la mínima oportunidad de ganar tiempo y dejar claro a los pilotos que la única opción era ganar y que para ello había que dar el máximo absoluto durante 4 horas. Yo creo que hasta Oliver se despeinó un poquito.

Ya os contamos que Kosta y Oliver hacen el cambio de pilotos en 12 segundos, pues bien, en esta carrera el reglamento decía que las operaciones tienen que ser "compartimentos estancos", no se puede solapar ninguna operación del cambio de piloto con las mecánicas ni estas con el repostaje.... y por un asunto familiar Álex se tuvo que ir. Uno de los mecánicos más rápidos estaba fuera y me tocó a mi suplir su puesto en el cambio de neumáticos.... yo.... que en toda mi vida he cambiado una rueda (ahora una y media) y esta vez tendría que hacerlo en 20 segundos máximo. Un "no puede ser tan complicado" junto con el hecho de ser asturiano llenó de tranquilidad absoluta el box, se respiraba en el ambiente... la parada estaba tan milimétricamente prevista que hasta en los ensayos nuestras comisarias favoritas (un beso desde aquí) nos felicitaban por la rapidez y que fuese la primera vez que viesen algo similar en su vida.

Llegaba la salida y las cosas salieron según lo esperado. Los pilotos del Megane Trophy ya nos habían dicho que la guerra no iba con ellos, acababan de comprar el coche e iban a probarlo, no siendo competitivo por su depósito de combustible a lo que se añadieron múltiples problemas. Los del BMW silhouette otro tanto, estaban fuera. Pero el Viper con De los Milagros (que ya sabéis que es Racing Gang) y sobre todo el Porsche con Pérez-Aicart eran cohetes en pista que llegaron a doblarnos en la vuelta.... 20!!!! creo recordar (yo seguía con mis prácticas de cambio de neumáticos). Si las cosas iban "normal", no había nada que hacer. Por cierto, el Porsche no era un Cup cualquiera, era el ganador de la Porsche SuperCup inglesa traído expresamente a la carrera por un piloto con muchas ganas de ganar aquí.

Pero tanto uno como otro gastan más combustible y neumáticos que el Ginetta, y los pilotos no son tan rápidos como Kosta, que hizo un stint sabiendo que aquello iba de atacar, a fondo, en los tiempos del coche en todo momento y luchando por una victoria que a esas alturas de la carrera empezaba a cuadrar.... iba recuperando tiempo al Gentelman del Porsche con un coche más lento, metiéndole hasta 4 segundos por vuelta y llegando a pasarle en pista por posición poniéndose primero!!

A pesar de que no estaban pasando demasiadas cosas los números empezaban a salir, los otros dos Ginettas de la categoría estaban más o menos controlados por detrás, a dos pasos de nuestros talones pero tal y como rodaba Kosta en los tiempos del coche y con media hora final de Oliver no pensábamos que nos fuesen a pillar si no había problemas adicionales. Al Porsche, por su parte, le quedaba una parada, en la que saldría el piloto que no era ni Pérez-Aicart ni el Gentelman. Las cosas estaban claras; si ese tío hacía los tiempos del coche (que algo habrían subido sobre el 1:55) lo teníamos muy complicado, si hacía los tiempos del Gentelman podríamos hacerlo, y si hacía los tiempos del Ginetta dependíamos del tiempo de su parada y la nuestra.

¡¡¡¡¡¡¡¡A POR ELLO!!!!!!!!

Pero claro, anochecía, y no sabemos por qué el coche no llevaba las luces encendidas. Mil intentos de encenderlas desde el coche no funcionaban y eso suponía que la parada no podría ser de cambio de piloto (20 segundos por tus huevos) y repostaje (dos garrafas y otros 30 segunditos), sino que había que arreglar o cambiar el capó. Opciones; que sea un fusible (lo comprobaría Manuel tras atar a Oliver), que sea la clema que esté suelta (lo comprobaría Mariano), que sea el cable (Juan y yo con el otro capó preparado).

Finalmente lo resolvió Manuel en el cuadro con los fusibles, repostamos y salimos sin perder apenas tiempo. No teníamos un minuto para perderlo en boxes....

Entre tanto el Porsche ya había entrado a cambiar de piloto, el que se subió hizo un buen tiempo para ser con neumáticos fríos, en la segunda vuelta un primer sector que nos llenaba el culo de preguntas y.... un trompo en el siguiente!! Vengaaaaaaa!!!!!!!

Además de eso se pasaron 3 minutos de reloj haciendo la última parada y la nuestra entre una cosa y otra no llegó al minuto!! Sin embargo a partir de ahí se estabilizó en unos tiempos similares a los del Ginetta, mejores sólo a veces y desde luego no suficientes para pillarnos. No había vista hacia atrás, sólo confirmar que no pasase nada más....

Y teníamos a Manuel Cintrano mirando a su iPhone jurando que no llovía mientras una nube negra venía hacia nosotros........ "el radar dice que no llueve!!". "Manuel, deja de mirar el teléfono y mira para allá".


Quedaba media horita de carrera y la incertidumbre no iba a convertirse en tranquilidad hasta la bandera. Kosta prefería no mirar.... Sólo a dos vueltas del final nos asegurábamos que ya ni un Safety-Car como el del año pasado iba a poner en riesgo la victoria, porque tanto el Porsche como el otro Ginetta vitaminado seguían en la misma vuelta. Por cierto, el radar de Manuel funcionó a la perfección.

Lo que ya no podrá faltar en próximas ediciones son los pasteles que todos los años nos trae Balbita con Pedro y Maite de porteadores, ya tía ya se mueve por el camión y el box como por el pasillo de casa, yo creo que en unos años si hay que cambiar una rueda se apunta ella. También hay que agradeceros a vosotros, que os tomáis literalmente la invitación de ir a vernos y nos encontráis por el box, unas veces más despejados que otras, y así compartimos esta afición común que tenemos. Lo de que gente de dirección de carrera venga a vernos no sólo es un puntazo, sino que demuestra que lo que hacemos aquí le gusta a la gente tanto como a nosotros. Y mención aparte la gente de Alcañiz en general; aficionada, dispuesta, generosa, simpática y Racing Gangs totales, es un placer ir cada año y tratar con todos ellos, UN DIEZ.

Mola esto de hacerse 4 horas al sprint y tener planes hasta el M para que al final se cumpla a rajatabla el A, pero lo que más mola es ganar, y aun más si sobre el papel las opciones son bajas, si tu coche no es el ganador porque dejan inscribir solo algunos GT3 y si el trabajo del todo el equipo, desde pilotos hasta mecánicos es el que se espera de ellos. Como decía Colin Chapman, "Bueno, no es suficientemente bueno" y sólo de esta forma consigues estar del lado del que se alegra de que "las carreras sean así".

Comentarios

  1. Give me the five!!! Leyendo pensaba que lo había vivido allí con vosotros... Ahhh al Sr. Pritarder le están pitando los oídos hasta año nuevo, jeje.

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  2. ¡¡¡ENHORABUENA CAMPEONES!!!
    ¡Un millón de gracias a vosotros! Los pasteles los tenéis asegurados.......de por vida, jejeje.
    Todo el equipo sois "una pasada", cada año nos hacéis sentir como "uno más" y el placer es nuestro por poder sentir la experiencia de una carrera "desde dentro"..............Y ENCIMA GANARLA....... ¡¡¡SIEMPRE!!!.
    ¡Un abrazo enorme para todos!
    Y el año que viene.......................¡¡¡A POR LA SEXTA!!!

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  3. Fue muy emocionante y muy divertido. Disfrutamos mucho. Gracias a todos por vuestro "buen hacer" y por hacernos sentir tan bien. ¡¡¡Sois unos campeones en todos los sentidos!!!

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