Prueba racing: Aston Martin V8 Vantage GT2



Aston Martin es una de las marcas con mas glamour del mundo, y su herencia en competición la convierte en una de las marcas míticas junto a Ferrari o a Porsche. Aston Martin ha vuelto a la competición de manera importante en los últimos años creando coches tan espectaculares y bonitos como el Aston Martin Vantage V8 GT2. En Racing Gang tuvimos la oportunidad de probarlo (Y de correr con él en LeMans...) y aprovechamos para contaros cómo es este coche tan especial.




El Logo de Racing gang en el Aston y en Le Mans!!!
Es imposible ignorar este coche. Cuando llegas al circuito y entras al box con tus maletas y lo ves ahí esperando a ser domado no puedes evitar que un escalofrío recorra tu espalda. Esos pasos de rueda ensanchados, ese pefil aerodinámico y ese super-alerón trasero hace que el coche sea realmente espectacular, mucho más que en las fotos.
Lo segundo que te llama la atención de este coche es la terminación. Todas las piezas son de carbono de la mejor calidad, con unos detalles que yo solo he visto en coches de Formula 1. Cada tornillo, cada soporte está diseñado y construido a la perfección.



El interior del coche llama la atención por varias cosas. En lugar de asiento o hueco de copiloto, tienes un aparato gigante que resulta ser el aire aconcidionado!!! pero no pienses que es como el de tu coche de calle, es un sistema complicadísimo que solo funciona cuando el gas no va a fondo. Esto es obligatorio en los coches de LeMans... y me parece genial.


El cuadro de mandos es muy simple, una pantalla detrás del volante con toda la información y un pequeño panel de botones en la consola central, donde los más importantes son los limpias, el control de tracción, el contacto general y fusibles. todos ellos dominados por un espectacular botón de arranque, que curiosamente es la ÚNICA pieza que comparte el coche con su hermano de calle.
El retrovisor trasero es una pantalla de vídeo encima del panel central, ya que el coche no tiene visión trasera. Funciona con una cámara como las que tienen los todo-terreno para aparcar, y la verdad no sirve absolutamente de nada, ya que es imposible juzgar la distancia de los coches que vienen correctamente.

El coche no tiene palanca de cambios, ya que solo tiene levas. Los pedales son muy curiosos, porque el coche está pensado para ser conducido con un pie en el gas y otro en el freno. Cuanta con pedal de embrague, pero es solo para arrancar y parar. resulta realmente dificil pisarlo, ya que con mucha dificultad entra el pie entre el freno y el soporte del pie. En caso de un trompo resulta un problema, ya que no aciertas a pisar el embrague para que no se cale el coche... bueno a fin de cuentas la idea es no hacer trompos, no?

Para arrancar el increible motor hace falta un proceso complicado. El motor una hora antes de arrancar tiene que ser enchufado a una máquina que pone a temperatura de funcionamiento el agua, el aceite y el bloque de motor. Todo esto antes de poder ponerlo en marcha.


Te sientas en el coche y te llevas la siguiente sorpresa. no se ve NADA!, vas sentado tan bajo y el cristal delantero está tan lejos que realmente tienes serios problemas para ver por donde vas. Desde que conducía monoplazas no tenía esa sensación de falta de visión tan agobiante, todo sea por el dios "centro de gravedad"...

La postura de conducción es perfecta, el volante cerca del piloto y las piernas perfectamente sujetas y en la postura adecuada para manejar los pedales, con un pie en el gas y otro en el freno.

Cuando arrancas el motor se abren los infiernos. Los escapes laterales emiten el sonido más bonito que se ha escuchado desde que tu mujer te dice que su madre se vuelve a su casa tras "unos diítas" en tu casa.

El Motor V8 emite un sonido brutal pero refinado, es como Mike Tyson vestido de smoking. Aston Martin es famoso por su sonido de motor, y como es lógico no iban a dejar que sus motores de carreras fuesen de otra manera. Escuchar a este coche en LeMans por la noche es algo que recordaré toda mi vida.


Sales a la pista y de nuevo sorpresas. El cambio es muy bueno, cambia de marcha con una pequeña explosión. Llama la atención la sensación de poca patada en bajas vueltas del coche, ya que pese a su potencia de casi 500 cv, no da la sensación de empujar mucho... pero en bajas vueltas, ya que a partir de 6.500 empiezas a sentir toda la potencia y empuje del motor. Es un coche que no te pone en aprietos de tracción. realmente el control de tracción no tiene mucha importancia en este coche, pero eso no significa que sea fácil de conducir, porque los aprietos de potencia los hace cuando ya llevas el pie en el gas a fondo unas décimas, haciendo que la puesta a punto correcta sea esencial.


Los frenos son lo buenos que deben ser en un coche de estas categorías, con la peculiaridad que al no tener ABS (Por reglamento GT2) cuando bloqueas una rueda el cuadro de mandos se pone de color rojo con la alarma de Wheel locked! curioso no?

Un coche muy técnico de conducir, no lo brutal que parece ser y muy sensible a la corecta puesta a punto. Este es una de los GT´s más dificiles de llevar a los tiempos que he conducido por ser muy refinado con una margen de utilización de neumáticos, reglajes y revoluciones muy pequeño, lo que hace que buscar una buena vuelta tenga mérito.

La prueba la hicimos en Le Mans y en Albacte. Corrimos el Aston Martin Festival y luego hicimos unas jornadas de test.

Conducir una leyenda es siempre especial, si además es así de bonita y suena tan bien es una pasada. Pese a lo dificil del coche, es inevitable bajarte de él con una sonrrisa. Aqui os dejo un vídeo







Comentarios

  1. Muy buenas impresiones, gracias por compartirlas.
    ¡¡Saludos !!

    ResponderEliminar
  2. Comparado con un 911 de GT2 ¿Es más fácil de mantener una temporada? ¿Es más sencillo o más difícil de llevar? ¿Cuál elegirías tú Javi para ganar carreras?

    Gracias de antemano

    ResponderEliminar
  3. Gerardo, Yo elegiría Porsche, por dos cuestiones, fiabilidad y consumo de gasolina en carreras largas. Las prestaciones y tiempos son muy similares, menos en lluvia donde Porsche tiene la ventaja. El Aston es un coche muy caro de mantener y muy sofisticado, lo que en realidad no es bueno. Cuanto más simple mejor.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares