Un día en las Gseries parte I

Lo prometido es deuda, y aquí estoy para compartir con todos vosotros mi experiencia en las Gseries con el equipo de Teo Martín y Auto1.

Hacer la maleta para este tipo de carreras es algo diferente a lo que estamos acostumbrados. Hay cosas que no se te pueden olvidar, el hans se queda en casa, nada de ropa interior ignífuga, mejor térmica, abrigo para cuando no estés corriendo, guantes de esquí además de los ignífugos y aparte de los botines de correr, unas botas de montaña.


Una cosa me ha quedado clara, si alguna vez corro el Rally de Suecia, meteré unas botas en el coche, aunque pesen, pero no quiero ni imaginar lo que puede ser quedarse tirado en mitad de un tramo y llevar los botines puestos con más de medio metro de nieve...

Había quedado en Atocha con mi compañero de equipo, Daniel Ron, un Racing Gang en potencia, auténtico quemado de los Kart, copiloto de Teo y piloto fijo en el equipo para este Campeonato.

El sábado por la mañana nos recibió con un frío impresionante, el suelo blanco pero un sol radiante. Tras desayunar, nos fuimos al circuito, había muchas cosas que hacer, entre ellas "probarme" el coche...


Al llegar, nos reciben los mecánicos del equipo PCR, que son quienes nos darían la asistencia, por cierto un lujo trabajar con ellos, todo fue rodado. Aquí de boxes nada de nada, una carpa como en los Rallyes, y una caseta de obra hace las funciones de "hospitality", con un par de calefactores eléctricos para conseguir una temperatura "humana" en su interior. Además del nuestro, PCR daba soporte a otros tres coches, pilotados por Francesc Gutierrez, Nani Roma, Gerard De La Casa y sus respectivos compañeros.



Por cierto, el vehículo de Roma, era un curioso Citröen C2 con mecánica y sistema de transmisión de Mitsubishi Evo.

Tras "probarme" el coche, ver un poco sus sencillos mecanismos y comprobar que las ruedas tenían todos sus clavos, nos fuimos a dar una vuelta andando a la pista. A la vuelta, De La Casa y Roma me dieron algunos consejos. El ambiente entre pilotos es realmente bueno.

Por cierto Nani nos estuvo contando cosas muy interesantes del Dakar, y de paso nos enseñó los pañales que usan para las etapas...


Llegó el momento de salir a pista, tras hacer Daniel la primera tanda, me pongo el casco, me meto al coche, ajusto los arneses y...."clonk" entra primera en el cambio de dientes rectos del coche, acelero, salgo a pista y sinceramente, creo que nunca me había sentido tan torpe en un coche. Los "snow bank" me miraban a los ojos y fui cogiendo tacto poco a poco, pero la bandera de fin de tanda me dejó con muchas preguntas por contestar todavía.

Eso sí, una cosa me había quedado clara, el coche ayuda mucho, es una pasada que algo tan sencillo sea tan eficaz!

Conforme pasaban las vueltas, me iba sintiendo más agusto, me empezaba a divertir y las cosas iban saliendo, y ya en la cuarta sesión la diversión fue plena, de veras, por momentos me sentí un auténtico piloto nórdico (bueno igual me he pasado...) De todas formas el crono es el que dicta sentencia en estas cosas, y la mejor vuelta de esa sesión fue de 51"100, a un segundo y poco de los más rápidos del lugar (por ejemplo Gerar De La Casa ya corrió el Andros allá por el año 2000).


Por la tarde cambió el tiempo y la pista, para mal, de repente en los entrenamientos oficiales volví a sentirme como en las primeras sesiones e incluso hice un bochornoso trompo, esto me llevó a clasificarme 14º de 16 pilotos, la verdad que no fue una posición muy honrosa...Para las finales, cogían a 8 pilotos por cada una, y precisamente los dos más lentos que yo les tocó la otra final, con lo que en la mía yo saldría el último.

Mi final sería la última, así que aproveché para ver la de los dos ruedas motrices, donde ganó de calle uno de los pilotos más completos que conozco, Joan Vinyes, y también la otra final de mi categoría, donde hubo "mucha fibra" pero por suerte, Daniel hizo un fantástico 4º puesto y sin tocar el coche.

Ya en "boxes" mi compañero me entrega el "relevo", me avisa que la luna térmica sólo funciona la mitad y me desea suerte.



La nevada aumentaba en intensidad, por suerte el lado de la luna que no funcionaba era el del copiloto y en la parrilla ya estábamos los 8 coches. Se apaga el semáforo y de repente una nube de nieve en polvo lo envuelve todo, apenas veo los pilotos del coche que me precede, uno de los coches se pasa un poco de frenada y a la salida de la primera curva nos ponemos en paralelo, le aguanto un poco y en la siguiente curva me pongo delante, bien!!! he pasado a uno!! ahora a mantenerlo detrás!! el caso es que veo que en la zona de enlazadas me arrimo con facilidad al sexto, pero en la curva larga se me escapa un poco y empiezo a olvidar al de atrás para centrarme en donde atacar al de alante. Por delante también hay luchas, y de repente el que iba cuarto pasa a estar delante de mí, empieza la última vuelta y en final de recta se cuela un poco, salgo muy pegado a él y en la frenada para una derecha lenta, meto el morro y acaba pasando el resto del coche, el subidón que me dio fue tremendo,había ganado dos plazas y sin tocar la fibra!ya sólo quedaba aguantar la plaza durante media vuelta para finalmente ver la bandera a cuadros en 6º lugar.

La conclusión la tengo clara, TENÉIS QUE PROBARLO!!!!

En la segunda parte os pondré un par de vídeos!

Por último, agradecer a Teo Martín el haber disfrutado de esta inolvidable experiencia!

Comentarios

  1. A pesar de estar acostumbrado a ir de lado tiene que ser bastante difícil tratar con un coche de estos y con la nieve. Además de lo que deben cambiar las cosas de un entreno a otro o a la carrera solamente por el paso de los coches o que caiga un poco de más de nieve.

    El circuito creo que lo conozco de un curso de BMW hace un tiempo inmemorial y si es aquél tenía su aquél. Has tenido que pasarlo pipa y sobre todo vivir una experiencia increible... que supongo que te habrá enganchado!

    Quedamos a la espera de esos vídeos!

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