Paco Martinez en el Dakar...

Parto de la base de que no me gusta llamarlo Paris Dakar, ni Dakar... Quizás eso de que no salga de París ni llegue al lago rosa influye, la verdad. Pero sobre todo lo que me importa es que, sin tener mucha idea de Raids o de las dificultades del Dakar tal y como era y tal y como es, me da que no es lo mismo.

Será que yo soy un nostálgico, y si bien por vídeos de internet es difícil entender una realidad pasada o presente, yo creo que esto del Dakar ha perdido parte de su principal componente; la aventura.


La llegada de las grandes marcas, de los equipos controlados hasta el extremo, los GPS, los libros de ruta milimétricos, las estrategias, los mochileros.... no sé, pero creo que el espíritu inicial de esta carrera era otro. Por supuesto que el objetivo es ganar, aunque en ninguna carrera como ésta cobraba sentido lo de simplemente llegar, pero creo que también la cobertura centrada en esa victoria ha hecho que los aficionados de sillón nos pensemos que eso del Dakar es fácil, en mi caso llegando a olvidar que lo que de verdad me gustaría es tomar la salida y, sobre todo, llegar a la meta.

Hace años hablaba con un piloto de Todo Terreno con experiencia en el Sahara, dunas, pistas... y me decía que no entendía las diferencias de tiempos de un oficial a un privado del montón, y de eso hace ya muchos años. Los grandes equipos con sus infraestructuras crearon una brecha enorme que hace que nos centremos en eso, la victoria, cuando en estas cosas la simple participación es ya un mérito enorme.

Y como esas cosas las valoramos en Racing Gang, hoy os dejo una historia de un participante, para que le sigáis. Yo no sé si lo que he leído es cierto o no, ojalá nos lea a su vuelta y nos cuente con todo el detalle que quiera su aventura, pero si lo es, lo de este tío es increíble: La lucha por cumplir un sueño y la manera de hacerlo en un mar lleno de tiburones ya es más que suficiente.

Se llama Paco Martínez, es albañil y se ha construido una moto para participar en el Dakar (bueno, eso del cono sur que hay ahora, sin desmerecerlo en ningún momento). Pero claro, cualquiera que sepa un poco de la prueba se da cuenta de que eso de "participar" aquí no tiene mucho sentido.... no es apuntarse y ya está. El equipo, la asistencia, los medios con los que cuentas, la preparación, el entrenamiento, el presupuesto... todo es a lo grande en un Raid como este. Y Paco lo está haciendo de la forma más genuina posible: como puede. Se ha construido una moto que él considera fiable para la aventura, se lleva un mecánico amigo como toda la vida se ha hecho en las carreras (pero este amigo se va a recorrer el mundo en una furgo), paga la inscripción y toma la salida.... que en este caso es la leche.

¿Y el entrenamiento? Pues si es verdad lo que dicen se pedía días libres en el trabajo para apuntarse a otros Raids y se iba a los monegros a pasar calor y entrenar etapas maratonianas... ¿y las dunas? Pues se hizo él solito un desierto al lado de casa para poder saber lo que le esperaba; cogía arena de una mina, la cargaba en su furgoneta y se hizo más de 200 viajes para poder recrear una etapa de desierto al lado de casa....



No le conozco de nada, aunque me gustaría invitarle a comer y que me cuente su experiencia, pero espero que le vaya bien, que cumpla su sueño y el de todos los que hemos pensado alguna vez en lo bonito que sería esa mágica llegada al lago rosa. Seguro que aunque esté en otro continente, él, y todos los que le seguimos, lo viviremos como tal.

Aquí tenéis un par de links para ver cómo va:

http://www.dakar.com/dakar/2012/es/piloto/174.html
https://www.facebook.com/groups/187526241290588/ (el grupo de Facebook que han creado para que podamos seguirle, gracias!).

De momento parece que las está pasando canutas con un par de problemas que le han retrasado y cansado bastante, y su mecánico ha tenido problemas en la transmisión de la furgoneta que llevan. Esperamos que todo se encauce!